EFÍMERO ESPEJISMO MENDOCINO PARA LA ALIANZA II

Las primeras entregas de los cómputos mendocinos mostraban un engañoso predominio boina blanco, por una diferencia que aparecía como una paliza por sobre el FPV.
Con el correr del escrutinio, las cifras se fueron achicando, y los 470 mil votos de Cornejo frente a los 400 mil de Bermejo, se transformaron en una diferencia de 7 puntos porcentuales.
Distancia clara y expresiva de un triunfo opositor, en una provincia de deslucida gestión del saliente Pérez, pero para nada una "goleada" como la que se pronosticaba antes de las PASO.
Además, muy por debajo de la enorme amplitud que obtuvieron los boinas blancas mendocinos en las legislativas de 2013.
Esto es: un triunfo de la UCR en soledad, por 48%  de los votos, contra 27% que totalizó el peronismo.
En tanto que el Pro+los gansos demócratas sacaron en las pasadas legislativas, un 5% y  el carrioismo un 2%. Esas dos fuerzas en las elecciones actuales, confluyeron en alianza con el radicalismo (así como otras sectas provinciales, tales como el massismo que controla una intendencia, las Liebres del Sur, etc).
Por su parte el FPV fueguino con Rosana Bertone, logró una apreciable diferencia de 9 puntos para ir con tranquilidad al balotaje.

Volviendo a Mendoza, la victoria  de la Alianza II, obrará como un tranquilizante placebo para sus dirigentes que venían golpeados por la derrota de Torres del Sel en Santa Fe.

Hasta Cuyo viajó MM, el tragabigotes porteño-centrista. Sin embargo el que copó la parada mediática fue Ernesto InSanzato, abrazado al pequeño mata guanaco Llach, rivales de Macri en la simbólica  interna con resultado puesto, que se llevará a cabo en ese espacio de la derecha liberal.
El placebo de la tierra del buen vino no le durará mucho a los republicanos, teniendo en cuenta el enorme problema que deben enfrentar en la Provincia de Buenos Aires.
El padrón electoral mendocino es apenas equivalente al 11% o 12 % del bonaerense. ¡Casi diez veces más grande es la cantidad de votantes en la decisiva Provincia de Buenos Aires!
Aníbal-Sabatella vrs. Julián-Espinoza pujaran en internas por ser la fórmula que buscará llegar a La Plata para suceder al kirchnerizado DOS, que ayer fue un sólido contertulio de 6-7-8.
De la diferencia que logre el FPV en la tercera y en la primera sección electoral, dependerá la posibilidad de que Scioli y el "comisario maoista que le puso Cristina" (cadena magnética dixit) se impongan en primera vuelta.
La reactivación del consumo que se prevé en el actual trimestre, insistiendo en impulsar la demanda interna cuando la externa sopla en contra (V.G.: caída abrupta de exportaciones automotrices a Brasil, caída de precios y menor liquidacíon de cosecha de soja, por acumulación con fines especulativos) desmiente a los catastrofistas.
Esa interesada caterva de voceros del capital concentrado y mega devaluador, que hasta hace poco confiaban en tener el "sale o sale", con Macri,  Massa, o Scioli. En ese orden, esos eran sus candidatos.
Hasta que la presentación de las listas del FPV, les hizo perder la confianza en el tercero de ellos.
Para colmo la odiada Shewua, parece tan confiada que ni fueros quiere.
No se presenta en ninguna lista.
Lo cual dejó bramando en el vacío a los "pensadores" de la opacidad más chirriantes y estultos.
Las deposiciones de, para citar a un par de psitácidos, Jota Barbaridad o del hijo bobo de Tato Bores, Alejandro Boring, repitiendo durante meses la zoncera de los fueros, ha dejado más confundido a su estragado público.
Ese que hoy festeja con forzado optimismo, el espejismo mendocino.
Hasta que pasado el rato, la realidad de lo que avecina agosto, lo vuelva a deprimir.