PAVOROSO: SUSY VIAU PRONOSTICA DEGOLLAMIENTOS EN MASA.

El plumín más desorbitado de la edición dominical del gran diario ernestino, Susanne Clotilde Viau, comenzó engañosamente a desarrollar sus parábolas de hoy, con cierto tino y realismo resignado.
Le fue adosando su impronta paranoide cuando se refirió al canciller Timerman y a Mariotto, pero todo dentro de los parámetros normales de una voluta de gas anti-k, comprimida en tinta para ser envasada en papel prensa de origen monopsónico.
Pero un vialólogo que se precie, debe leer hasta el final las boutades de Susanita, pues siempre aparece el elemento que la hace distinta, original, y (¿Por qué no decirlo?) simplemente psicótica.
Susy, olvidando que en todas las campañas electorales, sucedieron hechos de violencia e incluso varios muertos (recuerdo casos en las legislativas, promediando el gobierno de Alf padre), enumera en plural, episodios aislados -desde ya repudiables, innecesarios y lamentables- tales como "ataques sistemáticos de Tuta Mohamed a militantes de Proyecto Sur.
En verdad hubo un sólo caso en ese sentido, en una disputa por una esquina neurálgica de Villa Urquiza, que terminó con una mesa de pePinistas volando por el aire, sin que se lamentara herido ni magullado alguno.
No podia faltar la mención a un panfletero del Pro, de medidas antropoidales -casi dos metros de alto, por dos de circunferencia, un total de alrededor de cuatro metros cuadrados de homínido- quien en una discusión callejera con Lazzie Moreno, fue zamarreado y empujado contra un auto, lo cual como dijimos, es lamentable y al gas, pero tampoco se trata de un linchamiento en el desierto libio.
Por supuesto, Susanne coló en todo esto "el toque Viau", alertando con una fábula de Bertrand Rusell, un horrendo futuro que le espera a la sociedad argentina.
Una comunidad que ella quisiera ver masivamente en las calles indignada pidiendo que "se vaya la yegua" (y tambien -aunque no lo dirá nunca- cometiendo todo tipo de desmanes, algo que garparia mucho para su patrón magnético).
En lugar de ello, se contempla un panorama calmo, pacífico y tranquilo, en el contexto de una elección nacional con resultado cantado, lo cual perturba muchísimo a una plumífera anti-k taliban como Su.

La fábula dice así:
“El pavo de Russell: Cuenta la fábula que el pavo llegó al corral y observó que cada mañana sus cuidadores le acercaban una escudilla con comida sin pedir nada a cambio. A partir de ese momento, el pavo, embriagado de felicidad, graznó con fuerza al despuntar el alba. El gallo, celoso, le dijo que quien cantaba a esas horas era él. El pavo, replicó que graznaba de felicidad por su buena fortuna y para demostrar la veracidad de sus afirmaciones comenzó a anotar, jornada tras jornada, de qué manera se desarrollaba su existencia: “Hoy está soleado y la comida llegó a las 9”; “hoy ha llovido e, igual, la comida fue traída a las 9”; “hoy hace frío y la comida, como de costumbre, estuvo lista a las 9”. Así, durante cien hermosos días. Un amanecer entró el granjero al corral pero no traía en las manos la consabida bolsa de comida sino una filosa cuchilla. El pavo, habituado a confiar en su benefactor, no se resistió y se dejó llevar mansamente hasta la cocina.".

Como vemos, Susanita pronostica metafóricamente que el violento crisnerismo está anestesiando con alimentos -consumo, subsidios- a los argentinos, para mantenerlos calmos y en estado de pavositud. Luego, cuando menos se lo esperan procederá a implantar el terror, con degollamientos masivos al estilo Pol-Pot, líder del Khmer Rouge, circa 1975.
La conclusión que surge, tras esta tremenda revelación de Susy, es unívoca:
Qué cacho de pava es esta vejeta, por Dio´.