MACRI MOVILIZA A LA METROPOLITANA (AL ACTILLO DE MOMO)

El infra-gestor Maurizzio, quien reclama de la Presidenta, que haga el trabajo sucio de desalojar por la fuerza a mujeres y niños de un complejo habitacional de su jurisdicción, mientras él monitorea todo por televisión, para cada tanto, brindar su incalificable opinión en conferencia de prensa, se decidió por fin a movilizar a sus tropas.
Me refiero a la poderosa, y carísima, Policia Metropolitana, que como dijo el sub-estadista amarillo, es "de proximidad", (esto es, está próxima para labrar alguna que otra multa, parar algún que otro auto y pedir cédula verde y registro, o bajar a una Pizzeria, para manguear alguna que otra muza y faina).
Si hay casos graves o problemáticos, Macri ya aclaró que no es su competencia, sino "de la señora de enfrente". Lo cual no deja de ser implícitamente, un infrecuente  reconocimiento de ser un inútil consumado, por parte de este figurin opositor. 
Sin embargo, esta tarde el alcalde comisionó a un escuadrón de elite de la Metropolitana, encomendándole el cumplimiento de una delicada misión: animar con sus instrumentos policiales de viento y percusión, un acto del Momo Veneguetta, un lumpen empresario-sindical, al cual vaya a saber porqué, a esta altura presentan como si fuera una mezcla de Nelson Mandela con Jesucristo.
Estaba invitado el Cardenal Bergoglio, quien declinó tal dudoso honor, y entonces tomó la palabra el Obispo Musto, que más que preconciliar es antediluviano, y que suele bendecir las comilonas de Luiggi de Camaño en Marpla, con agua bendita que extrae....de una champanera extra brut.
El sotánico, criticó con vehemencia  la justicia terrenal del Juez Oyarbide, que "persigue" a Santo Momo, y por poco no lo excomulga.
Mientras la Metropolitana hacia gala de sus habilidades musicales, supliendo con ello sus carencias desalojistas, contemplaba la escena una embajada de notables prrrro enviados por el jefe Maurizzio.
Estaban presentes, nada menos que la mano derecha operativa  (es un decir) el bufo arenarum Rodriguez Cajeta, y el jefe de bancada, Fede Vinagreta Pinedo, un ultraliberal al que últimamente se lo ve muy afin al populismo de derecha del duhaldismo residual, como si los años 90, pudieran recrearse en esta runfla retrospectiva.
Finalmente tomó el micrófono el Momio Venereas, para inaugurar el instituto "Lorenzo Mariano Miguel", lo cual es una injusticia para con el caudillo metalúrgico fallecido, porque si bien fue un ortodoxo, nunca le sentó bien el  trabajo esclavo ni el menemismo, como sí a Luiggi, a Momo, y a las luminarias prrro allí presentes.
Tal vez más ajustado, hubiera sido bautizar al  instituto como "Colegio de Sindicalistas Garcas Jorge Jockey Club Triaca".
O bien, siguiendo con esa tónica, y viendo a la monada de la custodia, tambien podria haberse denominado "Escuela de Tercerización laboral  José Matazurdo Pedraza".
Cerrando el actillo de esta nociva caterva de antropoides, Mommo Veneguetta bramó contra este gobierno que se atreve a husmear en sus troqueles y sus ambulancias 4x4 de 100 lucas verdes, y alentó a sus partidarios a "reventar las urnas".
A su lado, Luisito  Barrionómico sonreia, tal vez  recordaba Catamarca  de marzo de 2003... cuando alentó a quemarlas.